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El Bestiario del Hypogripho Dorado

El Hannya

El Hannya

Imagen I: Una Hannya de Ythjontar, por Arnie Swekel.


 

Este artículo ha sido mejorado en la wiki
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Texto traducido de Oriental Adventures (D&D) y texto original de Jakeukalane.


1. Los Hannya.
2. La historia de la Hannya Bella.


1. Los Hannya

Las Hannya son monstruos japoneses. Familiar distante de ciertas brujas (Hag), los Hannya son mujeres humanas Wu Jen, Shugenja, chamanes o magas que han hecho un pacto impío con un espíritu oscuro y cuyo resultado ha sido su permanente transformación.

La mitad superior del cuerpo de una Hannya es el de una anciana humana (aunque según otras fuentes podrían asumir la forma de cualquier humanoide). Tienen una nariz larga y ganchuda, una lengua bífida de ofidio y pequeños y brillantes ojos de color negro, recubiertos con una película lechosa.


Hannya por Thomas Baxa
Imagen II: Hannya, por Thomas Baxa.


Su cuerpo es delgado y huesudo y su carne es de un verde enfermizo. Una afiladísima línea de dientes amarillos cubre su boca. El pelo negro y grasiento cuelga en largos bucles sobre sus hombros encorvados.

Sus delgados dedos terminan en garras afiladas. El resto del cuerpo de una Hannya es como la de una serpiente gruesa, cubierta de escamas verdes o negras y frío al tacto.

Los Hannya hablan el idioma común, el dracónico y el yuan-ti.

Una Hannya es un luchadora taimada y cruel, atacando casi exclusivamente a los débiles e indefensos. Cuando se enfrenta a un oponente que podría ser un rival para ella, se retira a la mínima oportunidad. Cuando una Hannya detecta la presencia de un víctima adecuada, como un sacerdote viajero o un niño perdido, emplea siempre la misma táctica. Su estrategia típica consiste en asumir la forma de una anciana con un rostro amable y buenas maneras. Luego planta una sugerencia en la mente de su víctima para "que ayude a una anciana solitaria que necesita ayuda o desea compañía"; también puede proporcionar a la víctima abrigo o comida. Si la víctima es persuadida, la Hannya la enreda en una agradable conversación hasta que se confía, entonces ataca.

Cuando está estrangulando a su víctima con la cola, la Hannya puede utilizar sus garras y morder a su oponente. Normalmente no atacan con sus garras o sus fauces a no ser que tengan inmovilizada ya a la víctima.

Como chamanes tienen poderosos poderes psíquicos entre los que se incluyen proyectar sugerencias y leer la mente. Un Hannya puede proyectar una sugerencia en la mente de un persona incauta a una distancia de hasta 30 metros de distancia de ella. Este habilidad que afecta a la mente y no depende del idioma, pues el mandato es emitido como una "instrucción básica". Las "instrucciones básicas" son hechizos mágicos que afectan a los instintos. Las "instrucciones básicas" tienen mucho que ver con las Esencias.

Por otra parte, el poder del hechizo es de octavo nivel.

Un Hannya puede usar esta capacidad tan a menudo como desee. Sin embargo, esta habilidad no afecta a seres que conozcan la verdadera naturaleza del Hannya o la vean como una amenaza.

También posee otras aptitudes sortílegas como cambiar a voluntad propia de forma (polimorfizarse) o detectar pensamientos. Estas habilidades también son hechizos de octavo nivel. La resistencia a la detección de pensamientos es muy baja en un ser no-mágico. Su mera presencia afecta al desarrollo de los animales y las plantas, perjudicándoles.

Un Hannya no entraría voluntariamente en una casa o cualquier otro edificio rodeado de macetas de violetas, ni tampoco atacaría a una persona que llevara un ramo de violetas, ya sea físicamente o con hechizos. De hecho, un persona que lleve violetas es inmune a que la Hannya pueda usar su habilidad de sugestión o detectar sus pensamientos. En tal caso, se polimorfiza en la forma de una anciana y, con dulzura, le pregunta a su víctima si puede poner las flores en un florero, donde las pueda admirar (lejos de la Hannya), o afirma que es alérgica a las violetas y pide a la víctima que las guarde.

A menudo los Hannya tienen nivel de lanzador de conjuros como: chamán, Shugenja, hechicero, o Wu Jen. Su clase predilecta es Wu Jen.

Cuando se reunen varias Hannya, comparten su poder y adquieren nuevas habilidades, como reanimar a los muertos, lanzar maldiciones poderosas, controlar el clima, provocar somnolencia, vaciar la mente de sus víctimas de pensamientos así como mejor visión y habilidades para lanzar conjuros. Los grupos de Hannyas también pueden crear "Ojos de Hag", gemas mágicas con las que pueden observar pueden ver cualquier lugar a su voluntad.

2. La historia de la Hannya Bella

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Se cuenta una historia de una hechicera muy joven que desafió a una Hamadríada. Como venganza, la Hamadríada le envío a la inexperta maga un Espíritu del Bosque. Estos Espíritus normalmente no son malvados (aunque tampoco especialmente benéficos). Sin embargo, la joven bruja tenía motivos para temer de los Seres del Bosque. En su búsqueda de magia exótica muchos árboles, hadas del bosque y duendes fueron sacrificados colateralmente.

Este Espíritu del Bosque engañó a la joven maga para que acudiera a un recóndito lugar del bosque donde las criaturas más ancianas contaban que habitaba un ser siniestro.

Era un espíritu demoníaco. Un Phateng de los Pantanos. En medio de aquel frondoso bosque se encontraba una enorme laguna de agua estancada, donde el Phateng maldijo a la joven maga e hizo que la poseyeran diversos espíritus malignos.

Sin embargo, cuando estos malignos seres entraron en su cuerpo, la maga se resistió a ellos y por ello no consiguieron tomar el control de su mente.

Por ello su aspecto no varió lo más mínimo. Intentó convencer a la Hamadríade de su arrepentimiento y así expulsara los espíritus malignos que la convertían en una Hannya (aunque incompleta). Sin embargo, la Hamadríada no pudo expulsarlos, pues de hacerlo la ahora Hannya moriría.

La Hamadríada ayudó a la maga a transformar a los espíritus malignos que habitaban dentro de ella y lograr que trabajaran bajo sus órdenes y no al revés. Para ello le encargó una serie de tareas en el bosque que repararan el mal que había causado a las criaturas del bosque a la vez de dominar y transformar a los demonios que habitaban su cuerpo.

Pasado el tiempo, su cuerpo empezó a transformarse poco a poco en el de una serpiente. Aún podía transformarse en su aspecto anterior, pero no era real. Se convirtió en una Hannya completa, exceptuando su carácter bondadoso y defensor de los bosques. Pero cuando la transformación se completó del todo, sucedió algo imprevisto: se convirtió en una mujer-serpiente (es decir, en una Hannya) terriblemente bella.

Superada la sorpresa inicial de recibir todas las semanas emisarios de distintos príncipes para que aceptara su mano en matrimonio, la Hannya Bella utilizó sus encantos para proteger aún mejor los bosques y las criaturas que habitaban en él.

Se cuenta que se casó con un Caralisco y que consiguió domar su carácter maligno para convertirlo en uno de los pocos Caraliscos bondadosos que existen.


Criaturas: Hannya (del Milegu/Ythjontar). Humanos, hadas, duendes, hamadríades, Espíritus del Bosque, Phateng de los Pantanos, Caraliscos.
Espacios Planares: Ythjontar, Tierra Neshl.
Conceptos: Esencias.
Objetos: Ojos de Hag.
Idiomas: Lengua común, idioma dracónico, idioma yuan-ti.


Nota I: Este texto proviene de los juegos de Rol de D&D (a excepción de la parte cursiva) y NO debe considerarse una versión mitológica. El Hannya mitológico original es muy diferente.


Texto: Traducido de Hannya Oriental Adventures (D&D) (PDF). Más Monster lore compendium (archive.org). Texto Hannya bella: Jakeukalane, original.
Imagen I: Arnie Swekel. Imagen original aquí → Hannya (D&D Art Gallery Oriental Adventures), Oriental Adventures (PDF) / Aventuras orientales (PDF). Imagen en tamaño completo aquí → Hannya (imagen).
Imagen II: Thomas Baxa. Imagen original aquí → Hannya (Kara-tur), —TSR 2116 Advanced Dungeons & Dragons 2nd edition: Monstruos compendium, Kara-Tur Appendix (PDF)—. Imagen en tamaño completo aquí → Las Hannya.

©Hyposs Productions. ©Arnie Swekel ©Thomas Baxa

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